martes, 16 de febrero de 2010

MONSEÑOR MAZUELOS, OBISPO DE JEREZ, PRESIDIRÁ, A LAS 20,00 HORAS, LA MISA DEL MIÉRCOLES DE CENIZA EN LA CATEDRAL

El Cristo de la Misericordia y el Ecce Homo centran, en besapiés y besamanos, el inicio del tiempo de Cuaresma en las parroquias de San Rafael y San Pedro

La Diócesis de Asidonia-Jerez celebrará, mañana miércoles a las 20,00 horas en la Santa Iglesia Catedral, el inicio del tiempo litúrgico de la Cuaresma. Se pondrá en marcha, como es tradicional, con el signo de la imposición de la ceniza que, en este primer templo diocesano, presidirá el obispo, Monseñor José Mazuelos Pérez.

Mientras tanto, todas las parroquias preparan la llegada del Miércoles de Ceniza añadiendo al gesto sobre la frente de los fieles manifestaciones de piedad popular. La de San Rafael y San Gabriel, de Jerez de la Frontera, expondrá en besapiés al Cristo de la Misericordia y, de igual modo, ocurrirá en la también jerezana de San Pedro con la del Ecce Homo.

Tiempo de oración, limosna y ayuno

Los católicos están llamados, durante este tiempo que comienza, a buscar la conversión reforzando la presencia en sus vidas de la oración, la limosna y el ayuno. El Miércoles de Ceniza se indica la abstinencia de la carne como expresión de las renuncias propias de la Cuaresma.

El besapiés de San Rafael, a diferencia del anual de San Pedro, tendrá lugar por primera vez. Ocurrirá entre las 12'00 y las 22'00 horas y ya prevé, en el primer viernes de Cuaresma, día 19 de febrero, la salida de la imagen, inédita en sus cuarenta y tres años de historia y presidiendo el Vía-Crucis, por las calles de la feligresía.

Acción de gracias

El párroco Angel Obradors, junto a los miembros de su Consejo Pastoral, indica que se trata, junto al valor penitencial que le es propio, de convocatorias de acción de gracias por la respuesta solidaria de tantos jerezanos a la llamada de la Cáritas parroquial con motivo de la recogida de alimentos de la pasada Campaña de Navidad.

El Cristo de la Misericordia, que será bajado de modo excepcional del lugar que ocupa en el presbiterio, es una imagen de indudable valor artístico obra del imaginero sevillano Antonio Illanes. Fue bendecida, en junio de 1966 por Monseñor José María Cirarda Lachiondo, entonces obispo auxiliar hispalense y vicario general en Jerez.