Jerez, 3 de
octubre de 2018.- La Pastoral Penitenciaria de Asidonia-Jerez está de enhorabuena. Su
delegado, el sacerdote jerezano Francisco Muñoz Valera, ha recibido de la
Secretaría General de Instituciones Penitenciarias (dependiente del Ministerio
del Interior) la Medalla de Bronce al Mérito Social Penitenciario. La entrega
de dicha distinción se llevó a cabo en el salón de actos del Centro
Penitenciario de Puerto III (El Puerto de Santa María) en el transcurso de los
actos de celebración del Día de la Merced, Patrona de Instituciones
Penitenciarias desde el año 1939.
Junto a los directores de los tres centros penitenciarios ubicados en El
Puerto de Santa María, representantes políticos y funcionarios, se hizo
presente monseñor José Mazuelos, obispo diocesano que le impuso la medalla al
“cura Paco”, como él prefiere ser llamado. El galardonado se mostró agradecido,
sorprendido y dispuesto a creer que “es un reconocimiento a toda la Pastoral que
lleva a cabo una labor muy seria. Quizá de las más bonitas que hacemos:
compartir con las personas que no tienen nada y están castigadas y casi
suprimidas”. Francisco Muñoz quiso recordar que el voluntariado “ha de seguir
compartiendo el mensaje de Esperanza de Jesús para hacer ver a los hombres y
mujeres que cumplen condenas que es posible seguir hacia delante”. El sacerdote
lleva realizando su labor pastoral en las cárceles desde el año 1979.
En el módulo 5
de Puerto II, los internos han rendido
también homenaje a la religiosa cordobesa de 85 años de edad, Purificación
Pérez, de la Congregación de Religiosas Esclavas del Sagrado Corazón de Jesús.
El homenaje fue muy emotivo no sólo para Pura sino también para todos los
voluntarios de Pastoral que le acompañaban pues los internos le organizaron una fiesta y entregaron regalos
en señal de agradecimiento por su vida entregada a ellos. Pura visitó por
primera vez las cárceles en el año 1988. A sus 85 años sigue dando ánimos a los
nuevos voluntarios para que no pierdan la ilusión en la tarea que se les ha encomendado.