La iniciativa del conocido movimiento, enmarcada
en la intención de la Nueva Evangelización, ofrece convocatorias periódicas que
disponen a los fieles desde la Eucaristía, la palabra, la vivencia y la oración
Medio
centenar de personas participaron el pasado fin de semana en el cursillo para
la Nueva Evangelización organizado por el movimiento Christifideles Laici y que
contó con la celebración de la Eucaristía y determinados momentos formativos y
para la reflexión.
El carisma del movimiento se basa en anunciar el Evangelio
y atraer a los hombres y mujeres hacia Cristo. Las directrices de acción están
inspiradas, en la Exhortación Apostólica Christifideles Laici de S.S. Juan
Pablo II, de la que recibe el nombre.
Estos cursillos de evangelización constituyen, en la brevedad
de un fin de semana y gracias a la intensidad de su propuesta, una interesante posibilidad
de descubrimiento, a través de la Eucaristía, la palabra, la vivencia y la
oración, del Amor misericordioso de Dios.
Se trata de disponer de un encuentro personal con Jesucristo, fruto del
cual se conviertan a la vida de la gracia y se lancen a vivir la vocación y
misión a la que Dios les llama.