Son las beneficiadas de los proyectos que Cáritas desarrolla en parroquias como San Pablo, San Rafael, San José, El Portal, San Cristóbal, La Barca y Olvera
Participantes de los diversos proyectos de promoción de la mujer que Cáritas desarrolla en diferentes parroquias de la Diócesis de Asidonia-Jerez acudieron el pasado fin de semana, en un número de alrededor de 160 personas, al XII Encuentro Diocesano de la Mujer.
Bajo la denominación de 'Nuestras Voces', acudieron representantes de San Pablo, San Rafael, San José, Perpetuo Socorro, Ntra. Sra. Del Pilar, El Portal y Sierra San Cristóbal (todas ellas de Jerez) así como de San Isidro Labrador (La Barca de la Florida) y Ntra. Sra. de la Encarnación (Olvera).
Este encuentro se celebra anualmente y forma parte del trabajo que se desarrolla durante todo el año con estos grupos de mujeres. Entre las 10 de la mañana y las 2 de la tarde del sábado, centró su contenido en el conocimiento de la realidad y la experiencia de las mujeres que participan en los diferentes proyectos.
Participantes de los diversos proyectos de promoción de la mujer que Cáritas desarrolla en diferentes parroquias de la Diócesis de Asidonia-Jerez acudieron el pasado fin de semana, en un número de alrededor de 160 personas, al XII Encuentro Diocesano de la Mujer.
Bajo la denominación de 'Nuestras Voces', acudieron representantes de San Pablo, San Rafael, San José, Perpetuo Socorro, Ntra. Sra. Del Pilar, El Portal y Sierra San Cristóbal (todas ellas de Jerez) así como de San Isidro Labrador (La Barca de la Florida) y Ntra. Sra. de la Encarnación (Olvera).
Este encuentro se celebra anualmente y forma parte del trabajo que se desarrolla durante todo el año con estos grupos de mujeres. Entre las 10 de la mañana y las 2 de la tarde del sábado, centró su contenido en el conocimiento de la realidad y la experiencia de las mujeres que participan en los diferentes proyectos.
La puesta en común de los trabajos que se desarrollan en cada uno de ellos constituyó un elemento primordial del desarrollo de la sesión, que además de polsibilitó un espacio de verdadero encuentro y convivencia entre las mujeres beneficiadas y las educadoras.