Educación e
ideología de género serán abordadas con profesores de religión católica de los
centros públicos así como los de los centros privados.
Jerez, 19 de
mayo de 2018.- La
Delegación Diocesana de Enseñanza organiza su encuentro anual de profesores de
religión que este año alcanza su XIX edición. Tendrá lugar el próximo jueves
día 24 de mayo en la Casa de la Iglesia, sede del Obispado. Los profesores
están convocados a las 17 horas para comenzar con una oración y la presentación
del encuentro por parte del Delegado Diocesano, Juan Ortega Álvaro.
El contenido
fundamental de esta cita será la intervención de monseñor José Mazuelos Pérez,
obispo de Asidonia-Jerez, sobre ‘La educación y la ideología de género’.
Colaboran en la realización del encuentro las editoriales Santillana, Edebé, Edelvives,
Anaya, SM, Casals y Vicens Vives.
8 de cada 10 alumnos eligen cursar Religión
Católica en la Diócesis
En el curso 2017-2018,
la enseñanza religiosa y moral católica es una vez más la opción mayoritaria,
escogida voluntariamente por casi 8 de cada 10 alumnos como recoge el informe
de la Delegación. Cursan la asignatura 70.036 alumnos, sobre un total de 88.145,
lo que representa un 79,14 %, porcentaje
similar al del curso pasado.
Por tipos de
centros, el porcentaje de alumnos que cursan religión en la Escuela Católica es
del 99,87 %. En los de titularidad estatal, la media porcentual entre todas las
etapas es del 74,24 % y en los de iniciativa social civil, la media se sitúa en
el 65,66 %.
Derecho de los padres y agradecimiento
Conviene recordar
que la enseñanza religiosa escolar forma parte del derecho de los padres a
educar a sus hijos según sus convicciones religiosas. A ellos corresponde la
educación de sus hijos y no al Estado. La eliminación de este derecho o la
imposibilidad de elegir libremente el centro educativo para sus hijos
debilitarían significativamente nuestra democracia. En una sana democracia, las
administraciones centrales y autonómicas deben favorecer dicha educación
elegida por la familia o los propios estudiantes, sin intentar imponer otras
concepciones éticas. Al Estado no le corresponde imponer su visión del mundo y
del hombre ni una ética determinada sino servir al pueblo, formado por diversas
sensibilidades, credos y formas de entender la vida.