Coinciden el Año Jubilar de la Misericordia, cuyas indulgencias podrán lucrarse con tal motivo, y el cincuentenario de la entronización de esta imagen en esta parroquia de la zona sur jerezana
Jerez, 4 de junio de 2016.- El Cristo de la Misericordia, que preside la parroquia de San Rafael y San Gabriel, será trasladada mañana domingo a la Catedral del Salvador para que los fieles participantes ganen las correspondientes indulgencias del Año Jubilar de la Misericordia que celebra la Iglesia. Se aprovecha el cincuenta aniversario que se cumple este fin de semana de la entronización de esta obra del imaginero Antonio Illanes en el altar mayor de este templo de la zona sur jerezana.
Jerez, 4 de junio de 2016.- El Cristo de la Misericordia, que preside la parroquia de San Rafael y San Gabriel, será trasladada mañana domingo a la Catedral del Salvador para que los fieles participantes ganen las correspondientes indulgencias del Año Jubilar de la Misericordia que celebra la Iglesia. Se aprovecha el cincuenta aniversario que se cumple este fin de semana de la entronización de esta obra del imaginero Antonio Illanes en el altar mayor de este templo de la zona sur jerezana.
Monseñor José Mazuelos Pérez, el obispo diocesano, presidirá a las 11:30 horas de este 5 de junio, en el primer templo diocesano, la celebración de la Eucaristía. Previamente, partirá la comitiva parroquial con el crucificado desde su templo a las 9:30 horas. Tras recorrer algunas de las arterias más importantes de la feligresía, marchará hacia Cuatro Caminos, será recibida en la ermita de Guía por la Hermandad del Perdón y alcanzará más tarde la Catedral accediendo por la Puerta Santa.
Los tres días previos ha tenido lugar en la parroquia la celebración de un triduo preparatorio que ha concitado la atención de muchos fieles que han acudido en torno al Cristo de la Misericordia, que es imagen que apenas había salido nunca del templo al que fue llevado cuando éste fue construido. Es la primera vez que va a la Catedral, por tanto, lo que ha sido recibido con gran expectación no sólo entre los fieles de San Rafael y San Gabriel sino en toda la ciudad.