A la atención de todos los señores Párrocos, Rectores de templo y Hermanos Mayores de las Hermandades y Cofradías de la Diócesis de Asidonia-Jerez.
Dada la frecuencia con que llegan a la Vicaria General de este Obispado consultas acerca de la correcta colocación de imágenes en besamanos, queremos con esta nota dar unas orientaciones litúrgicas para que sean seguidas:
1. El altar es el lugar más venerable de la iglesia, pues representa a Cristo, único altar de la nueva ley, por eso es objeto de dedicación y recibe la unción del santo crisma. En el ritual de Dedicación de Iglesias y Altares, leemos: “En virtud de la unción con el crisma, el altar se convierte en símbolo de Cristo… El altar cristiano es ara del sacrificio eucarístico y al mismo tiempo la mesa del Señor, alrededor de la cual los sacerdotes y fieles, en una misma acción pero con funciones diversas, celebran el memorial de la muerte y resurrección de Cristo y comen la Cena del Señor…”.
2. Dice el Ordo General del Misal Romano en su nº 296 que el altar “es la mesa del Señor, para cuya participación es convocado en la Misa el pueblo de Dios”. No puede haber imágenes, ni candeleros que “impida a los fieles ver fácilmente lo que sobre el altar se hace o se coloca” (nº 307).
Por tanto, dado que el altar es lugar central que debe atraer las miradas de todos los fieles en la celebración eucarística, no se deben colocar imágenes en besamanos delante del altar si éstas impiden la visión del mismo o de lo que se coloca o se hace sobre él.
Dado en Jerez, a 10 de marzo de 2016.
Federico Mantaras Ruiz-Berdejo
Vicario General