Monseñor Mazuelos, obispo de Jerez, presidió la Eucaristía que, acompañada por algunas de las mejores voces flamencas del barrio, fue un llamado a esta recuperación de “este legado de nuestros mayores que testimonia la fe de un pueblo que no es ajena al dolor de tantos hermanos nuestros en plena crisis”
Jerez, 25 de julio de 2014.- La fiesta de un barrio y toda una ciudad, vestidos de gala que, en torno a la Eucaristía, celebran la alegría de sentirse identificados en el signo de un templo ahora cerrado al culto pero el año que viene, si Dios quiere, al fin reabierto. Ello es lo vivido en la Misa de Santiago que, un año más celebrada en plena plaza junto al gótico templo del Apóstol en obras, ha presidido monseñor José Mazuelos Pérez, obispo de Asidonia-Jerez.
Jerez, 25 de julio de 2014.- La fiesta de un barrio y toda una ciudad, vestidos de gala que, en torno a la Eucaristía, celebran la alegría de sentirse identificados en el signo de un templo ahora cerrado al culto pero el año que viene, si Dios quiere, al fin reabierto. Ello es lo vivido en la Misa de Santiago que, un año más celebrada en plena plaza junto al gótico templo del Apóstol en obras, ha presidido monseñor José Mazuelos Pérez, obispo de Asidonia-Jerez.
Un estrado con la imagen del Santo escoltado por los estandarte de todas y cada una de las hermandades y cofradías de la feligresía ha permitido, ante más de dos mil fieles, dejar como retablo de fondo la esplendida factura de esta extraordinaria joya alfonsí, bellísima pese a verse envuelta en andamios. El pastor contó con la participación del párroco, Diego Moreno, y otros sacerdotes en la concelebración así como de algunas de las voces flamencas más notorias del barrio.
La interpretación de la 'Misa Flamenca de Antonio Gallardo' fue acompañamiento musical de una celebración en la que monseñor Mazuelos recordó que festejar a Santiago como patrón de España es “un deber de gratitud” con la fe recibida. Por ello consideró que trabajar por la rehabilitación y reapertura de este templo jerezano tan emblemático es un deber para con “este legado de nuestros mayores que testimonia la fe de un pueblo que no es ajena al dolor de tantos hermanos nuestros en plena crisis”.
“Este esfuerzo lo llevamos adelante sabiendo que no va en perjuicio de los que padecen la crisis, si no todo lo contrario. Recuperar este templo, corazón del barrio, conlleva crear puestos de trabajo, alimentar la fe que favorezca la caridad cristiana que haga crecer que haga crecer la justicia y la verdad, ayudar a este barrio y a su gente a salir del abandono en el que están sumidos y, lógicamente, una apuesta de futuro con un patrimonio que es riqueza, turismo y por tanto trabajo”, ha dicho el obispo.
Las voces de Felipa del Moreno ‘La Cantarota’, Anabel Rosado, Mª del Mar Barea, Manuel Marín, Macarena de Jerez, Manuel de la Fragua y Antonio Agujetas; el toque de José Carlos Pozo y Domingo Rubichi y la coordinación de José Gallardo Quirós han dado forma a la presencia musical en la celebración en una de las cunas del flamenco en Jerez. Pero tras la misa, y a beneficio de la restauración del templo, toda una velada reunió otras voces hasta altas horas de la noche.
La celebración acogió también, a su final, el homenaje de la iglesia diocesana y la asociación 'Jerez por Santiago', que promueve la búsqueda de fondos con los que afrontar el coste de las obras que en la iglesia realiza la empresa Tragsa, a algunos de los más veteranos feligreses de Santiago, testimonio de gratitud a los máximos representantes de algunas de las más enraizadas familias flamencas de un barrio que acoge como suyo el esfuerzo liderado por el obispo diocesano.