martes, 15 de diciembre de 2009

DESCIENDE ALARMANTEMENTE LA APORTACIÓN DE ALIMENTOS A CÁRITAS DE SAN RAFAEL PARA SU CAMPAÑA DE NAVIDAD

Los 6.000 kilos recibidos hace un año se han quedado para éste en sólo 500 pese a que el número de personas atendidas mensualmente se acerca al millar

Cáritas parroquial de San Rafael, que atiende a una amplia y humilde feligresía ubicada en la zona Sur de Jerez, está atendiendo en estos momentos a un total de 237 familias (casi un millar de pesonas), lo que se corresponde con un importante incremento, fruto de la difícil situación general que está viviendo el conjunto de la sociedad, de las cifras que eran habituales hasta el momento.

A ello hay que añadir el descenso alarmante de las aportaciones que, generosamente, venían llegando a la zona en forma de alimentos no perecederos. Así, y debido a que muchas de las familias que colaboraban con Cáritas San Rafael también sufren ahora problemas, de los 6.000 kilos recibidos hace un año se ha pasado a sólo 500 en la presente campaña de Navidad.

Llamamiento urgente

Se necesitan, con carácter urgente, alimentos no perecederos como legumbres, pasta o productos lacteos con los que atender a los más necesitados de barrios como Federico Mayo, Santo Tomás de Aquino, La Liberación, Cerrofruto, Primero de Mayo, San José del Agrimensor y Poeta Miguel Ramos, que son las que conforman dicha feligresía.

Las personas que deseen realizar alguna aportación pueden hacerlo poniéndose en contacto, con Cáritas de San Rafael, llamando a la propia parroquia al 956/348795 ó al responsable Francisco Holgado al teléfono 655/535840.

Más allá de la labor puramente asistencial

La labor de Cáritas de San Rafael, que se dotó de nuevas instalaciones parroquiales para ello, va, con todo, más allá de lo puramente asistencial. De hecho son un total de 80 las familias beneficiadas en sus talleres de promoción. Este año se han cumplido veinte desde la creación del Taller de Promoción de la Mujer y en 2009 se ha estrenado uno en materia de prevención de drogodepencias.

La actual situación, sin embargo, hace no sólo insustituible sino también urgente una asistencia de la que dependen muchas familias de la zona.